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Inmensamente no.ella,
indescriptiblemente diferente a su propio yo,
la antítesis más perfecta
de lo que algún día fue. Y sin válida razón
ella acepta estos cánones opuestos
a lo que su esencia le indica.
Supone inconscientemente que es muy chica,
que los otros sabrán qué hacer de su vida.
Y, así, ella no es dueña de sí misma.
Y, así, otra tuerca más se inserta al sistema.
Te dicen que te despreocupes, que no importa.
Te ofrecen un plato de mediocridad en bandeja de plata.
Te incitan a estancarte, a conformarte con lo que sos, a que no busques crecer, mejorar...
Te perforan el cerebro con frases vacuas e ideas perversas.
Y vos, ¿qué hacés?
En este mundo donde la palabra "joven" es sólo otro sinónimo de descontrol, joda, alcohol, fiesta, pavear y tantos otros términos; en este mundo donde pareciera que el querer encontrar el equilibrio entre diversión y responsabilidad, alegría y seriedad, flasheadas y lucidez; en esta sociedad tergiversadora de los valores que muchos de nosotros añoramos mantener y consolidar... En esta (nuestra) situación actual, ser un joven diferente para bien, pareciera ser tarea imposible.
Sin embargo, no queda otra que seguir luchando por el cambio.
¿Por qué el ser humano tiende a querer auto.destruirse sin motivo aparente?
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Una loka que anda por ahí
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3 comentarios:
Wow, que poético :P
Para mí que el ser humano se quiere autodestruir porque es bastante fácil... mientras la víctima no oponga resistencia.
Querida Pau:
Veo que te gusta mucho la palabra "vacuo". Yo tengo antojos similares. Cada tanto mi palabra "inteligente" varía.
Comparto tu interés en buscar una nueva meta para la juventud.
Saludos
Patricio Iglesias
O quizás no es que se quiere autodestruir, sino que desde hace años que el conciencicidio viene ganando terreno. Quizás es que no es tan claro que nos estamos destruyendo, y no hay ni la más mínima intención de cambiar nuestra actitud. Es preocupante, es alarmante cómo se está yendo todo al diablo.
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